HOMENAJE A MIGUEL CANCELA

 

Texto: Beatriz Gómez                                      Fotografías: V.V.A.A.

 

Miguel Cancela Rivas ha fallecido el viernes 1 de Octubre de 2.010 después de enfrentarse día a día durante muchos años a una larga y dura enfermedad. Y lo hizo con el valor de un torero pensando que era un toro difícil pero que con técnica se podía resolver. Al final el toro le ganó la partida pero el dejó entrever su buen quehacer durante toda la lidia.  

Nació el 6 de Noviembre de 1.943 en Colmenar Viejo, localidad que le vio crecer como persona y como torero. Sus andanzas en el mundo del toro comenzaron junto con sus vecinos y amigos Catalino Froilán, Eustaquio Jaén y Félix “Trifin” que hacían escapadas nocturnas a la Dehesa para intentar evocar el toreo. Primeramente con unas cortinas y posteriormente con un “capote” que había comprado Catalino y Eustaquio. Esto le produjo el famoso gusanillo de querer ser algo más y decidió ir a la plaza de toros de Colmenar Viejo a entrenar.

 

Allí, con 17 años, comenzó a aprender a torear de salón junto a Agapito García “Serranito” que por entonces era novillero. Y se dio cuenta que no sabía absolutamente nada a pesar de que creían saberlo todo. Ese mismo año empezó a torear vacas toreadas en casa de Fermín Sanz. Hasta que por fin tuvo la oportunidad de participar en el primer tentadero de su vida con reses de “Los Eulogios” en el “Zahurdón” (ahora propiedad de su sobrino Carlos Aragón Cancela) junto con “Serranito”, “el Tranquilo” y “Maravilla”.

Después de debutar sin picadores y torear 7 u 8 festejos se compró su primer capote que le costó 900 pts. y su primer taje de luces de “Serranito” por la misma cantidad.

 

Debutó con picadores el 27 de Agosto de 1967 en Colmenar Viejo junto a “Macareno”, Adolfo Rojas y “Baena” de rejoneador. Actúo por primera vez en “Las Ventas” el 15 de Octubre de 1972 después de torear un número corto de festejos, su mejor tarde en este coso fue el 1 de abril de 1973 con novillos de Diego Romero con los que obtuvo una vuelta al ruedo y una oreja. Después de torear siete festejos más, el 18 de Noviembre de ese mismo año toma la alternativa en Vistalegre actuando como padrino “El Inclusero” y como testigo “Cinco Villas” con astados del conde de Ruiseñada.

 

Dejó de vestir de luces en 1979 aunque posteriormente toreó algún que otro festival, el último en Soto del Real brindándole el novillo-toro a su hermano Luis.

Cedida por: Roman Gómez
Cedida por: Roman Gómez

A continuación se dedicó por completo e incluso pidió más favores que para él mismo, para ayudar a sus dos sobrinos Luis Cancela y Carlos Aragón Cancela en sus carreras como toreros. Ambos llegaron a ser matadores de toros y pasearon el apellido Cancela por toda España.

 

En 2.003 se creó la Escuela taurina de la localidad de Colmenar Viejo que lleva su nombre, de la cual ha sido maestro y ha difundido toda su sabiduría sobre el arte de Cúchares a los más jóvenes. Ya lo hacía mucho antes de que fuera oficial todas las tardes en la plaza de la Corredera.

 

En 2.005 fue galardonado con el premio “a la dedicación taurina” otorgado por la Asociación Taurina Cultural Tierra de Toros, porque siempre ha estado vinculado al mundo de los toros.

 

QUERIDO MAESTRO:

 

Estos días no están siendo fáciles, porque a cada paso que doy me acuerdo de ti, porque tú me enseñaste andar como andan los verdaderos toreros, imprimiendo su esencia en cada huella.

Dentro de unos días será tu cumpleaños y he pensado que te gustaría que fuera a la plaza como tantas veces lo has hecho tú de forma diaria a lo largo de tu vida, donde has sido aprendiz y a la vez maestro, donde has depositado tu alma torera cada vez que pisabas su ruedo, donde has soñado y has permitido que los demás lo hicieran, donde has forjado tu estilo de vida y lo has compartido con niños, jóvenes, adolescentes, adultos y mayores sin importarte ni su sexo ni su edad; porque tenías muy claro cuál era tú misión: transmitir el amor que tú sentías por los toros. A pesar de saber que existen un sin fin de dificultades, no sólo por la bravura del animal si no también por su carácter social. Pero quizás eso es lo que te ha hecho grande porque has sabido transmitir de forma positiva todo eso en forma de cariño, comprensión, esperanza, ilusión, …

 

Gracias a ti he podido cumplir mi sueño: vestirme de torera y esperar a que sonaran clarines y timbales para dejar volar a mis sentimientos y crear algo irrepetible con lo que disfrutar yo, por supuesto tú y todos los demás. Además me has permitido también saborear las mieles del triunfo. Y ...

¡Qué bonito es poder saber que lo que yo sentía en esos momentos tan efímeros tú ya lo habías sentido antes y sabes lo que se siente y cómo me estaba sintiendo yo en esos momentos!

¡Qué maravilloso es que sin hablar, con tan sólo una mirada, se desarrollaba nuestra capacidad de empatía!

 

Espero volver a verte pero por si acaso te buscaré en mis trastos, en cada uno de los muletazos, en cada tarde de toros, en cada instante que desprenda aroma taurino, en cada lágrima de felicidad y añoranza, en cada suspiro de miedo y valentía, en cada … granito de arena que se impregnó con tu esencia torera.

 

Hasta pronto maestro.

 

Un abrazo.